Comentario al cortometraje El Héroe de Carlos
Carrera, que ganó la Palma de Oro al mejor cortometraje en el festival de
Cannes, Francia en 1994.
Se trata de una película muy lúgubre. De hecho,
este filme de dibujos animados no tiene colores ni tonos brillantes, sino
solamente colores grises y negros. El cortometraje duró más o menos cinco
minutos, pero fue suficiente, porque al final me sentí desmoralizada. Las
escenas fueron de una gran ciudad, como puede serlo la Ciudad de México o Nueva
York. Al principio pudimos ver los rascacielos, el clima no es bueno y la
ciudad estaba en la oscuridad, quizá a causa de la contaminación de la
atmósfera.
La caricatura siguió desarrollándose y cada vez fue
más y más triste. En el metro, había muchas personas que caminaban rapidísimo
sin preocuparse por las demás personas. Todos tenían modales feos. Había sólo
una persona que estaba vestida diferente y con colores más vivos. él era el
héroe de la historia.
Nuestro héroe estaba evidentemente decepcionado de
cómo se había transformado la ciudad. Trataba de buscar cosas que le hicieran
sonreír, pero hacia cada lado que miraba, había solamente tristeza, desolación
y dolor: un viejo fue rechazado del metro porque tenía un boleto dañado, no
pudo ir más lejos; un bebé corría alegremente y su madre lo jaló y lo apretó
contra ella hasta que empezó a llorar; finalmente, unos hombres se pelearon.
En la estación la gente esperaba el siguiente
metro. Nuestro héroe todavía estaba buscando una muestra de humanidad. En lugar
de eso, vio a una niña que le pareció muy desesperada. Sus ojos estaban vacíos,
sin luz. Pudo ver que quería suicidarse. Supo inmediatamente lo que ella quería
hacer. Corrió a salvarla para que ella no saltase. Tuvo éxito, pero al ver que
el héroe no le permitiría suicidarse, empezó a gritar. De repente, vino un
agente de policía que se lo llevó detenido sin hacerle preguntas.
Inmediatamente, la niña saltó en frente del siguiente metro, injustamente, sin
que nadie tuviera conciencia de su muerte.
Mi opinión:
Me dio mucha pena que no hubiera
más humanidad en este mundo. Me pareció muy triste que ella quisiera
suicidarse, pero quién no habría querido suicidarse en un mundo tan lúgubre. Me
asustó que la chica fuera a suicidarse y me apenó muchísimo que llamara "idiota"
a quien sólo quería ayudarla. Fue injusto que fuera arrestado. Es necesario que
nos ayudemos, especialmente cuando hay una señal de socorro en los ojos. Ojalá
que un mundo como ese nunca y en ninguna parte exista. No estoy segura de que
pudiera tolerar vivir así. El hombre parecía decepcionado de la ciudad en la
que vive. Sus compatriotas son seres malos. Espero que en la realidad la gente
sea más humana.
* Estudiante del cuarto nivel de Español
EPESA-UNAM en San Antonio, Texas,
EUA