Para conocer el idioma español

REGLA

En español existe una regla que exige cambiar, en algunos casos, el artículo femenino la por el masculino el, aunque se trate de un sustantivo del género femenino. A esta regla se debe que digamos el alma y no la alma, sin que se afecte el género del sustantivo que sigue siendo femenino (el alma buena).

Para que opere esta regla es necesario que la a inicial del sustantivo sea tónica , es decir, que caiga en ella el acento prosódico (independientemente de que lleve o no tilde). Ése es precisamente el caso de el alma; en cambio no podemos decir el arena aunque arena comience con a, , dado que esa a es átona -la tónica en arena es la vocal e .

La regla tiene, como siempre, sus excepciones: si se trata de un adjetivo con a tónica, no suele cambiar el artículo, decimos, por ejemplo: la ancha puerta; existe también uno que otro sustantivo con a inicial tónica que , sin embargo, conserva el artículo femenino, por ejemplo, la hache -el nombre de la letra.

En el caso de la / el azúcar el sustantivo azúcar, comienza ciertamente con una a; sin embargo, no es tónica, sino átona, pues la tónica, incluso con tilde ortográfico es la u. La alternancia del artículo no obedece entonces a la regla explicada arriba, como muchos creen. Lo que sucede es que el sustantivo azúcar, según el Diccionario académico, pertenece al grupo de los llamados ambiguos, que son aquellos a los que conviene indistintamente el género masculino o femenino. Debemos revisar la lengua hablada y escrita contemporánea para determinar cuál predomina, ¿el azúcar o la azúcar? Ambas son correctas.