Voy a hablar un poco de una de las figuras históricas más importantes para el pueblo brasileño, Dom Pedro II. Nació en 1825 y murió en Francia, en 1891. Fue el último emperador brasileño (único nacido en suelo brasileño). Su reinado fue de 1831 hasta 1889, cuando se proclamó la república en Brasil. Tenía un fuerte sentido del deber y una devoción hacia su país y todo el pueblo y transformó Brasil en una potencia internacional. Brasil creció de forma distinta a sus vecinos hispanoamericanos debido a su estabilidad política; a su libertad de expresión; al respeto a los derechos civiles y a su crecimiento económico regular así como por su forma de gobierno: una monarquía parlamentaria.

Pedro II también ganó tres guerras contra sus vecinos (la Guerra contra Oribe y Rosas, la Guerra de Uruguay y la Guerra de la Triple Alianza). Fue también responsable del fin de la esclavitud, a pesar de la oposición económica vigente. Por ser un mecenas conocido en todo el mundo, tenía el respeto y la admiración de estudiosos como Charles Darwin, Víctor Hugo y Friedrich Nietzsche. Fue amigo personal de Louis Pasteur. A pesar de no existir un deseo de cambio en la forma de gobierno en la mayoría de los brasileños, el emperador perdió su corona por un golpe de Estado que sólo contaba con el apoyo de unos pocos líderes militares que querían una república gobernada por un dictador. Pedro II estaba cansado y desilusionado, dejando, a pesar del apoyo popular, que finalizara la monarquía. Pasó sus dos últimos años de vida en Europa. Su caída fue poco común, ya que fue depuesto cuando era muy querido por el pueblo. Los mismos hombres que lo exiliaron pronto lo convirtieron en un modelo para la república brasileña. Algunas décadas después de su muerte, su reputación fue restaurada y sus restos mortales fueron llevados de vuelta a Brasil.

*Estudiante brasileño de Español Intermedio 1

CEPE- Polanco, UNAM, México, DF

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