Un día, en una montaña, buscando un templo para pasar la noche…
Yanli Dong*
En el invierno de 2009, mi esposo y yo decidimos subir a la montaña para celebrar la Navidad. Habíamos preparado muchas cosas para calentarnos.
Cuando llegamos al pie de la montaña, la montaña se había cubierto de nieve. Era muy difícil subir a la cima.
Escalamos por ocho horas y yo ya estaba muy cansada. Mi esposo me ayudó a llevar mi bolsa y continuamos caminando hasta que oscureció. Todavía no encontrábamos el templo en donde planeábamos pasar la noche. Estábamos agotados y no podíamos seguir subiendo.
Finalmente decidimos acampar en la tierra nevada. Hacía mucho frío. Nos pusimos toda la ropa y nos abrazamos para calentarnos.
Nos levantamos cuando amanecía; justo en ese momento vimos que el templo estaba a sólo veinte metros de distancia.
*Estudiante de China, Español 5
CEPE-CU, UNAM, Ciudad de México
Visiten el blog de la revista, donde podrán escribir opiniones y comentarios sobre este artículo:
https://floresdenieve.cepe.unam.mx/blog/index.php/2019/12/20/un-dia-en-una-montana/